Entrevista a… Victor Jaubert

Este ilustrador tinerfeño es una de las jóvenes promesas en el campo de la plástica isleña. Nacido en Santa Cruz de Tenerife, pero de sangre palmera, ha encaminado su producción hacia el campo del dibujo, donde su estilo se asemeja más a los dibujos animados que a la pintura en el sentido estricto. En sus ilustraciones, tanto el humor, como el detallismo casi oriental y la desbordante imaginación marcan un leitmotiv propio y personal.

Entremos en su mundo onírico y conozcámosle mejor:

 -¿Cómo fueron tus orígenes en este mundo?

-Siempre me recuerdo dibujando. En el colegio haciendo los murales y cómics de los compañeros de clase, en el instituto caricaturas de los profesores y copiando de arriba abajo a personajes Disney y dibujos de la tele.

-¿De dónde viene esa tendencia por los dibujos animados?

-¡Me encantaban! Salía del colegio corriendo y me sentaba frente al televisor con el bocadillo que me hacía mi abuela. La receta era la misma, pan con chorizo, pero con los dibujos me daba igual.

Creo que es una añoranza o que disfruté mucho de mi niñez y siempre en lo que hago hay cierta tendencia a evocar esas animaciones, álbumes de cromos y sintonías que aún retumban en mi cabeza. Dibujos, series, cine, juguetes, etc…

-¿Cuáles dirías que son tus influencias?

-Mis influencias creo que es un cóctel de todo lo nombrado anteriormente: mis dibujos animados que nunca me perdía. Tanto por las tardes con Willy Fog o La aldea del arce, o los fines de semana después del telediario con Gadget o Daniel el travieso.

También grandes películas que veía con mis padres como, La condesa de Hong Kong, Mogambo o comedias de Dorys Day peleándose continuamente con Rod Huckson por teléfono y oír continuamente a Frank Sinatra , Diana Ross o los Camperters.

Todo ello se ha mezclado en mi cabeza y ha dado como resultado mi forma de dibujar.

Actualmente admiro a muchos dibujantes, pintores e ilustradores: Charles Schulz (peanuts), Toulouse Lautrec, Miroslav Sasek (colección “esto es…”) son alguno de ellos.

-¿Cómo surge en tu obra la figura de la Femme fatale?

-Siempre me ha encantado esa imagen de señora recargada, en decadencia y gestos exagerados. Creo que en el Erasmus que hice vi a este tipo de señoras al que no estaba acostumbrado ver en canarias y me impactó.

-Sé que has ilustrado cuentos infantiles. ¿Cómo es la experiencia de llevar al campo representativo personajes y situaciones que no han sido creadas por ti previamente?

-Me gusta, es siempre un reto. Se te plantean personajes, situaciones e incluso animales, por poner un ejemplo, a los que por tu comodidad nunca te habías enfrentado.

-¿Es un hándicap?

–Para nada. Son ejercicios que vienen genial y te sacan de tu área de comodidad. Aprovechas para tocar diferentes técnicas y variar.

-Varios años has conformado el cartel de Los Indianos, supongo que dado tu origen palmero tendrá una gran carga emocional dicho encargo pero, ¿qué significa para ti esta fiesta?

-El carnaval de mi infancia. Un carnaval tradicional, que me ha acompañado toda mi vida y aunque se incremente el número de asistentes se mantienen actos, costumbres, personajes; que por lo menos para mí, hacen que no pierda su esencia.

-¿Podemos ver tus propias experiencias en tus carteles?

-Se hicieron tres carteles:

El primero de ellos, la llegada. La mañana, desde muy temprana, queriendo representar esa gente que aparece en las calles desde muy temprano armando bulla y con polvos en la mano. Eso era algo nuevo para mí y lo quise representar con ese “Correillo” donde viajó mi familia.

El segundo cartel era la tarde, es a esta hora cuando realmente siempre había empezado esta fiesta y su pasacalles.

Y el tercer cartel, cuando acabábamos ese gran desfile en la Alameda con una gran verbena muy tradicional.

Claro que son mis experiencias y lo que he representado es lo que he visto desde muy pequeño, unos carnavales familiares que han ido creciendo y ganando en popularidad.

–También he visto que has desarrollado talleres infantiles, ¿Cómo es la experiencia de trabajar con niños con una materia prima tan creativa como es el arte?

-Es muy divertido cuando les explicas tus procesos a la hora de dibujar y se atropellan por levantar la mano para contar sus propias experiencias o la reacción al verte pintar. Es lo que más les gusta. Son muy creativos y me sorprenden continuamente.

–¿Por qué buscas el factor de la risa en tu obra?

–Siempre me ha acompañado el humor, siempre ando riéndome. Toda obra que realizo me gusta que provoque una carcajada o una sonrisa cómplice. Donde el niño y el adulto se diviertan.

-¿Te ves dibujando algo dramático/triste?

-Creo que no.

-¿Qué proyectos tienes ahora entre manos?

–Ahora mismo estoy terminando un cartel para unas fiestas patronales en Tenerife, esperando a que se publique Javier es una estrella y con la idea de ir a Fuerteventura para realizar un par de talleres en colegios.

-¿Cuáles son tus dibujos animados favoritos?

–Demasiados. De los que vi en los ochenta cuando era pequeño, Ulises 31 o Scooby Doo. Y de los actuales me quedo con Hora de aventuras.

-¿Se puede vivir del arte en las islas?

-Si hablas del arte como obra expositiva solamente, no te sabría decir, creo que tendrías que tocar diferentes ramas en tu propio arte. Exposiciones, charlas, talleres,…

Y en cuanto a la ilustración u obra digital pues yo creo que gracias a internet y a las diferentes redes, sí podrías trabajar en Canarias. Para Canarias y para el resto del mundo.

-¿Cómo ves el panorama artístico isleño?

–En Canarias hay gente muy buena y de la que me considero fan auténtico. Algunos se han marchado, otros se han quedado pero hay gente buena. Hablo del campo de ilustración y pintura, que es lo que más conozco.