Bejo, Miss Caffeina y Javiera Mena, lo mejor de Phe Festival 2017 (Parte II)
Sábado
Media hora de sesión de Full FX congregó a los asistentes alrededor del escenario preparando el cuerpo para Siloé. Su indie-pop y el suave meneo corporal que produjo dio paso al rock noventero con toques disco de The Taxman.
No fue hasta Los Vinagres que el público se vino arriba. Comenzaron cuando se empezaba a poner el sol y la sombra de sus pelos a lo afro se extendió poco a poco por el público. En menos de cinco minutos conquistaron al público con su rock canalla y sus apelaciones cariñosas a Las Islas.
Cuando salió DJ Pimp al escenario el desconcierto reinó. Después de un par de canciones salió Bejo y el público estalló en euforia. Esta se mantuvo durante toda la actuación con caramelos, napolitanas de chocolate, cebollas, latas de sardinas y mangos (en alusión a sus canciones) que tiraba al público después de interactuaciones de los más carismáticas. El artista canario invitó a cantar un par de temas a Don Patricio, que se trajo galletas para compartir con el público. Los abucheos, a petición del propio artista en lugar de aplausos, hicieron que Bejo se animara a bajar del escenario y meterse entre el público para cantar su último tema saltando con sus fans más acérrimos.
Con rotura de bajo al escurrírsele de entre las manos a Deu Txakartegi, vocalista de WAS (We Are Standard), comenzó su show. Entre halagos a la isla y sus gentes de deshizo mientras buscaban sustituto para su mellado bajo. Pese a la espera no se tardó en coger el hilo y seguir bailando al ritmo electro tan característico del grupo. ‘Irrintzi’ sin duda hizo venirse abajo a todos, la canción más esperada.
León Benavente, mal escaletado en el orden de las actuaciones para muchos, se dejó la vida en su actuación. Sus letras crudas y sus ritmos duros y suaves a destiempo hicieron las delicias de sus fans, y el desánimo de los amantes del electrodance. Abraham Boba se deja la vida en cada canción y el público respondió a ello alzándolo cuando bajó del escenario al término de su show.
La sesión de YALL volvió a encender a los más bailongos desde el principio. Los catalanes cerraron por todo lo alto una jornada protagonizada por las ganas de saltar a ritmo electrónico. Cerraron por todo lo alto con su mítica ‘Hundred Miles’ y las luces hacia los asistentes se encendieron para no volver a apagarse.
Las luces del Phe Festival prometen encenderse por muchos años. Un cartel impecable, aunque no ordenado a gusto de todos, afianza al festival portuense y hace a la organización empezar a trabajar para la que será, sin duda, una de las grandes fechas del archipiélago el próximo año: Phe Festival 2018.
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