El desfile más deseado
Si vives por y para la moda en España habrás escuchado un nombre que desde hace dos años suena cada vez con más fuerza, Palomo Spain. Sí, ese Cordobés que hace ropa para hombres pero curiosamente genderless. Ropa cómoda, rosa y con un fondo de revolución detrás; ya sabéis que a mí esta parte me puede.
¿Pero cómo ha conseguido este diseñador de moda a sus 25 años conseguir ser el desfile que abre la primera edición de la MBFWM off (es decir, por fuera del recinto de IFEMA), ni más ni menos que en el Hotel Wellignton de Madrid y ser el desfile más deseado? Estilistas, bloggers, diseñadores, modelos y redactores, todos moríamos por una entrada a el que sería el desfile de este septiembre.
En una entrevista para la revista Vanitatis confiesa que cree que la moda española necesitaba a alguien como él, ya que los diseñadores españoles se sienten cohibidos por ser de España y tiene miedo de llevar este sello fuera de la frontera. Sí que es cierto que ha conseguido aquello que se había propuesto, que la moda española se preguntase cómo y cuándo llegó, pero que nadie tenga queja. Con su firma quiere dejar clara una cosa: “conseguir que mi ropa sea todo un canto a la individualidad, sin estereotipos ni clichés”. Gracias.
Después de desfilar en Nueva York, vestir a Miley Cyrus en su regreso a la música, con su videoclip Malibú, y de que Beyoncé mostrara a sus dos hijos al mundo con una bata de su firma, no podía no ser el desfile más deseado. Y todo esto en un 2017 que la verdad le ha ido mucho mejor que a otros.
Y como digo, no defraudó.
En el front row teníamos a Lindsay Lohan, siendo el foco de atención de todo paparazzi, y a Pedro Almodóvar, que como fan declarado de la firma no dejaba de sacar fotos. Como modelos a destacar, después de sus ya comunes palomos, teníamos a Rosy de Palma para cerrar el desfile en uno de los hoteles más lujosos de la capital.
¿La colección? Una maravilla. Podías ver al típico palomo, un chico de dos metros delgado y lampiño, caminando sobre tacones verde menta y una bata de tul azul cielo bordado, con pedrería y mucha pluma. Porque sí, porque palomo.
Muchos ya le comparan con el John Galliano, por lo barroco de sus colecciones, aunque él a esto simplemente responde con que “Galliano entendía muy bien a las mujeres, y yo, entiendo muy bien a los hombres”, y así es. Crea la figura de un nuevo prototipo de belleza masculina, un hombre con una masculinidad tan fuerte que no le da miedo enfundarse en unas botas de tacón y una bata roja con plumas en los puños. Porque los hombres también lloran, y porque también nos gusta el rosa.
