Dadi Dreucol: Utilicé el resguardo de una multa para hacer un boceto de mi próximo mural y lo vendí por internet al precio de la infracción

-¿Cómo surge el interés por la pintura, y posteriormente, el dar el paso a las grandes superficies de un muro?

-Empiezo a escribir grafiti en mi adolescencia, a partir de ahí comencé a interesarme por el arte. Más tarde me especialicé en dibujo y pintura mural. Lo demás ya ha ido surgiendo de un modo bastante natural.

-A la hora de desarrollar un trabajo tan monumental como son algunos de tus murales, ¿qué inconvenientes y beneficios encuentras?

-No soy un muralista de grandes formatos. La mayoría de mis trabajos son a pie de calle. Me siento bastante cómodo así, aunque las dimensiones grandes no me incomodan. Creo que el tamaño es solo otro factor más, que no hace ni mejor ni peor a una obra. En el caso de los grandes formatos el beneficio incuestionable, a veces, es la foto final; lo cual tampoco me seduce especialmente. En ocasiones estos espacios tampoco gozan de la visibilidad que pueda tener un pequeño mural en el centro de una ciudad o en un barrio muy transitado.

-Háblanos un poco de tu método de trabajo, por lo que tengo entendido a la hora de realizar un mural tienes muy en cuenta el contexto en el que va a estar.

-Para mí los murales son resultado de procesos de investigación más o menos profundo. Por lo tanto, según mi conocimiento del lugar, del tiempo que disponga y de los medios pues trato de hacer algo lo más específico posible. Unas veces funciona mejor que otras, pero es una fórmula que, incluso en el grafiti, llevaba a cabo.

-Has pintado en múltiples ciudades, barrios, países… ¿Cuál ha sido la que más te ha marcado no solo por su contexto geográfico, si no por el social?

-He salido alguna vez de España, pero de momento la mayoría de contextos que conozco son de este país. Al ser un territorio con bastantes contrastes culturales es interesante tener esta excusa para viajar y conocer ciudades. Las que más me han marcado son en las que he vivido, en las que paso la mayor parte de mi tiempo, hoy en día esta ciudad es Málaga.

-¿Has tenido alguna vez algún incidente o anécdota mientras desarrollabas tu trabajo?

-Salir a pintar casi siempre supone una aventura particular. A veces la gente te molesta, te agasaja o te menosprecia. Otras veces te multan o te echan del lugar y otras te invitan a merendar. ¡Demasiadas anécdotas para citar solo una!

-Una vez te pillaron y te multaron. Cuéntanos cómo viviste esa experiencia y cómo la resolviste.

-Me han multado más de una vez. En el caso al que creo que te refieres es uno en el que me pareció algo injusto y no tenía mucho dinero como para gastarlo en pagar una multa. Utilicé el resguardo de la multa como soporte para realizar el boceto del próximo mural que pensaba pintar y lo vendí por internet por el mismo precio que me pedían por la infracción. Tuve suerte y la llamada a la acción se viralizó, vendiéndose muy rápido.

Utilicé el resguardo de una multa para hacer un boceto de mi próximo mural y lo vendí por internet por el precio de la infracción

-Dado que eres de Málaga, ¿cómo definirías el panorama artístico de tu ciudad natal en comparación con otros tantos lugares donde has estado desarrollando tu arte?

–Hay muchos pequeños museos. Y parece que cada vez hay más interés por una oferta cultural diversa. Aún queda mucho para alcanzar cotas de calidad de otras ciudades. La facultad de arte es muy joven aún, y sobre todo hacen falta artistas jóvenes y canales de difusión adecuados.

-¿Crees que en España tenemos ya una mentalidad tan abierta como otras ciudades europeas en el campo muralístico?

-Creo que en España hay artistas del entorno urbano muy interesantes. También pienso que quizás con otro tipo de eventos la ciudadanía adquiriría otras sensibilidades respecto a esta disciplina. Sensibilidad que hoy no se tiene. Y no creo que sea solo en el caso español.

-Según tú, ¿qué diferencia hay entre un grafiti y un mural?

-Yo diferencio varios tipos de grafiti, pero lo que todos tienen en común es la escritura, ya sea de un nombre, de eslóganes políticos o de obscenidades en los aseos públicos. Los murales son trabajos generalmente realizados con pintura sobre una superficie rígida, normalmente horizontal.

-Hace poco estuviste trabajando en nuestra isla con el proyecto cultural ‘¿Por qué la cultura importa?’. ¿Cómo fue tu experiencia? ¿Te gusto la isla? ¿Te trataron bien?

-Fue una residencia intensa, ya que pasé a solas varios días explorando la ciudad. Pinté un mural en el que resumí algunas de las impresiones que más me interesaron durante el tiempo que pasé allí. Espero que conviva bien con los vecinos durante el periodo que se mantenga intacto.

-En tu obra vemos mucha figuración, simbolismo y un cierto aire surrealista. ¿De donde parte todo este mundo creativo?

-De mis referencias: generalmente del cine, la literatura y el cómic. Pero también de la actualidad, ya sea internet o las últimas noticias. Y por supuesto de mi propio ámbito de investigación: el grafiti, el arte urbano y las contraculturas.

-Y ya para finalizar, ¿qué nuevos proyectos tienes entre manos y donde podremos verlos?

-Participo en varias exposiciones colectivas próximamente. No obstante este año estoy más centrado en la investigación teórica y en depurar mi nueva serie de pinturas murales, así como las pinturas, dibujos y proyectos de estudio que las acompañarán. De momento hasta aquí puedo leer.