La Elasticidad de Las Nuevas Masculinidades a través de la Fotografía

El copyright de las fotografías pertenece a los autores de las mismas.

La fotografía como medio ha exclamado todas las transformaciones en cuestiones humanísticas, en el caso de las llamadas nuevas masculinidades rozando la hipérbole. La realidad costumbrista de los roles masculinos se designa también a través del retrato. En este pequeño ensayo intentaré esbozar la definición de la modernización del concepto masculino en la imagen, invitando a voces esenciales para comprender tres ángulos diferentes: editores de revistas especializadas, directores creativos y modelos. Estas opiniones estarán sazonadas por mis especias derivadas de toda la información obtenida y de mi propia experiencia. Bordeando las fronteras de diversos campos fotográficos: la fotografía de moda, artística y conceptual, la representación masculina evoluciona hacia la antítesis del estereotipo tradicional mientras conecta valientemente y sin reticencia con la vulnerabilidad y la sensibilidad.

La Elasticidad de Las Nuevas Masculinidades a través de la Fotografía

Modelo: Gato que pinta. Fotografía por Mario Iru. Estilismo de Grey Gardens

Madonna encontró la inspiración de la canción “What it feels like for a girl” en una cita de voz hablada (spoken word) de la película “The Cement Garden” en la que la actriz Charlotte Gainsbourg lanza con dulzura un certero mensaje:

“Girls can wear jeans and cut their hair short, wear shirts and boots. ‘Cause it’s OK to be a boy. But for a boy to look like a girl is degrading. ‘Cause you think that being a girl is degrading. But secretly you’d love to know what it’s like… Wouldn’t you? What it feels like for a girl”.

“Las chicas pueden usar pantalones vaqueros y cortarse el cabello corto, usar camisas y botas. Porque está bien ser un chico. Pero que un niño luzca como una niña es degradante. Porque tú crees que ser una chica es degradante. Pero en secreto te encantaría saber cómo es… ¿no? Lo que se siente para una chica”

Sirva esta cita como una importante reflexión inicial sobre el asunto a exponer.

La Elasticidad de Las Nuevas Masculinidades a través de la Fotografía

‘Nature Guy’ por Seigar.

La visión triangular que he tomado como punto de partida para descifrar las nuevas masculinidades son las publicaciones, los directores creativos y los modelos, este triángulo se completará con algunas reflexiones y posibles cuestionamientos.

El primer lado para comprender este movimiento estético e ideológico es el espacio que ocupan las revistas del campo. Entre una infinita oferta de publicaciones, he partido de una selección de publicaciones referentes como son Slippage Magazine, Fuuucking Young, Kalblut Magazine, Drugipargaca Magazine, Rey Magazine, NFG Magazine, Boys Fine Art Magazine y Boys by Girls Magazine. Si echamos una presurosa mirada en las cuentas de Instagram de este grupo encontramos una imagen tan audaz y atrevida como brillante y luminosa. Existe al mismo tiempo una rotunda explosión de belleza inundada en una representación generalmente joven. El color se reparte en ráfagas de tonos pasteles edulcorados, estallidos intensos, calidez, e incluso el sepia o el blanco y negro. Y una tendencia al minimalismo centra nuestra visión en los sujetos. Entrando estrictamente dentro de la actitud, las poses y el lenguaje corporal, destacan tres entre varias preferencias: la languidez y el decaimiento, en los bordes del aburrimiento y la apatía; la chulería desafiante pero sin esfuerzo y, en tercer lugar, el movimiento irreverente que tiende a una locura indescifrable. Esta caracterización formal que se sitúa en la intersección entre los géneros por medio del maquillaje, la peluquería y la moda, se completa a nivel de contenido con mensajes y lemas casi a modo de anuncio de libertad, rebeldía, desenfreno y provocación como si las nuevas masculinidades viviesen en un estado festivo continuo. El resultado de toda esta desatada conjunción se encamina a construir una flamante y donairosa identidad.

La explosión de sensualidad en estas fotografías suele ser tan manifiesta que se enfrenta con el drama de la censura y los límites actuales en las redes sociales, por esto en muchos casos las publicaciones deben hacer auténticos malabares y curiosas piruetas para burlarla, como les ha pasado a muchos grandes creadores en el pasado. Es probable que este tenso juego para evitar la cancelación haya mantenido una línea fina entre la provocación y la vulgaridad, entre el subjetivo buen gusto y la ordinariez. Otra intrépida labor de los editores de estas revistas es la equilibrada selección y comisariado para contrapesar la estimulación artística y visual, con la determinante venta de productos, ya sea ropa, complementos, maquillaje…etc.

La Elasticidad de Las Nuevas Masculinidades a través de la Fotografía

BOYS! BOYS! BOYS! un proyecto de The Little Black Gallery

Una más que autorizada voz en el mundo de las publicaciones de este tipo de fotografía es Guislain Pascal, agente de celebridades y publicista, incluyendo al fallecido genio de la fotografía Bob Carlos Clarke. Fundó junto a Tamara Beckwith Veroni The Little Black Gallery una de las más importantes y emergentes galerías de fotografía de Londres. Guislain es también un gran coleccionista de arte que guarda en una exhibición permanente en su hogar en Francia. Combina estos trabajos con su labor de editor de libros y revistas especializadas, entre ellas destacan: Boys boys boys, Girls girls girls, y Boys fine art. Sobre el asunto tratado Guislain me comentó: “El concepto de masculinidad ha estado siempre en un estado de flujo. A través de la historia, los ideales masculinos han ido y venido. En las últimas décadas, ha existido un enorme cambio en la imagen de la masculinidad occidental que ha resultado en un espectro de ideales más amplios. Este cambio cultural ha sido creado por activistas políticos que cambiaron la sintonía de nuestras expectativas de la masculinidad. Pero son los fotógrafos en particular los que se han convertido en cruciales para reflejar este cambio de vuelta a nosotros. Después de todo, es el deber del fotógrafo mostrarnos el mundo que ven alrededor de ellos a través de sus propias lentes. En Boys! Boys! Boys! y en The Little Black Gallery luchamos por presentar el trabajo de fotógrafos que sentimos que mejor reflejan este punto de vista contemporáneo. Desde luego, es una perspectiva profundamente personal, pero el arte es, y siempre será profundamente personal”. De esta forma definía Guislain su visión y trabajo con la fotografía de las nuevas masculinidades, dejando clara que la fotografía es un espejo de nuestra sociedad, y que a su vez la visión sobre el arte sigue siendo íntima y propia.

El segundo flanco, ya introducido por Guislain, está representado por los directores creativos de diferentes generaciones que interpretan a su manera la creación con sujetos masculinos. Respaldados, apoyados y completados con unos equipos creativos que presentan la cocción perfecta del menú a degustar. Hablamos de fotógrafos, asistentes, especialistas en iluminación, decoradores, estilistas, maquilladores, diseñadores y otros artífices que se sincronizan para conseguir recrear auténticas fantasías surrealistas que logren transmitir misivas fantasiosas formales y de pensamiento inteligente de una forma directa, clara y que sean capaz de comunicar, buscando la admiración de los que miramos, y creando a su vez necesidades materialistas.

Para desarrollar este lado del triángulo con mucho detalle he invitado a varias voces creadoras y prestigiosas, todas con una extensa experiencia en el mundo artístico; en primer lugar, el fotógrafo mexicano Nelson Morales, con gran proyección internacional, aborda temas sobre el género, el cuerpo y la diversidad sexual, contamos a la vez con David M. Ortega fotógrafo canario de retratos, moda y eventos, responsable de Hartmonize: agencia nómada de producción y representación de artistas, por otra parte tenemos la perspectiva del talentoso Mario Iru también mexicano y especializado en retratos, moda, belleza y editoriales comerciales, y finalmente la voz femenina de la versátil fotógrafa de moda barcelonesa Vinyet.

La Elasticidad de Las Nuevas Masculinidades a través de la Fotografía

Depths of the Sea para MMSCENE por Vinyet.

El archiconocido y universal Nelson Morales nos contaba así su experiencia: “He abordado el tema LGBTIQ+ desde hace doce años, durante este viaje he explorado distintas comunidades y grupos sociales. Mis temas en un inicio se enfocaron principalmente en comunidades trans femeninas; sin embargo, con el tiempo me fui interesando por las masculinidades diversas y emergentes. Durante este trayecto me he sorprendido ya que he comprendido que los grupos sociales continúan fluyendo y mutando haciendo que la libertad de expresión y la búsqueda de una propia identidad no tenga límites. También he analizado que dentro de todas estas nuevas expresiones sobre las nuevas masculinidades tienen un toque performativo que lo hace más interesante y para generar un diálogo. De algo que estoy seguro es que las identidades masculinas seguirán evolucionando y nunca nos dejarán de sorprender como artistas de la lente”. Así reflejaba Nelson el carácter mutante de la identidad y del género, su trabajo ofrece un gran prisma para comprender el asunto de las nuevas masculinidades. Una de sus múltiples exposiciones fue “Cuando Los Cuerpos Desobedecen” en la ciudad de Oaxaca, el título es bastante clarificador para entender el arte performativo que nos presenta.

La perspectiva canaria del tema nos la trae David M. Ortega que reside en Gran Canaria, pero advierte que vive “siempre con la maleta preparada”. David nos contaba: “Desde el punto de vista creativo es indiscutible que el concepto de masculinidad está cambiando y gracias en su gran parte a la generación Z.  Aunque la mía (millennial) se ha apuntado a este cambio lento pero en la correcta dirección, es verdad que por nuestro aprendizaje social nos cuesta más. Y aun siendo valientes y cambiando, nos sigue costando mucho. Tanto en el panorama artístico, como creativo, como en nuestras vidas. Sin duda las nuevas generaciones serán las encargadas de cambiarlo por completo. Pero soy feliz al ver que todo va cambiando y ya nos va pareciendo más regular ver a un chico con falda o collares de perlas”. El responsable de la agencia Hartmonize me apuntaba insistiendo al factor generacional para poder comprender el asunto, con el sentimiento de que serán los futuros creadores los que realmente puedan coronar la metamorfosis. Conociendo su delicado y minucioso trabajo diría que David le ha dado un buen empujón por su parte a la diversidad con unas editoriales que abarcan un gran abanico de imágenes masculinas.

El cuidadoso y profesional Mario Iru nos narraba así su punto de vista: “Sobre mi visión de las nuevas masculinidades en la fotografía de moda, soy creyente de que la representación, lo que vemos en medios como la TV, el cine, las revistas, etc, tiene todo que ver con la manera en que llegamos a concebir como “normales” unas cosas y otras no tanto, hablar de representación obviamente involucra muchas tangentes, y la masculinidad y la manera en que esta debe verse, según algunos, siempre ha sido algo muy cuestionado (como lo debería ser todo)”. Este argumento en la acelerada implantación de la cultura de la cancelación creo que es una prioridad, comparto la opinión de Mario y considero además que no deberíamos tener miedo a equivocarnos si lo hacemos desde una intención inofensiva, deberíamos ser capaces de establecer diálogos en vez de cegarlos con caminos únicos e inamovibles. Mario continuaba: “Me parece excelente que se hable tanto de nuevas masculinidades hoy, y que cada vez más personas se sientan con la libertad de poder expresar su identidad de género como mejor les parezca, o que cada vez más hombres se sientan cómodos reconociendo su propia feminidad y la de otros, y considero que el que la industria de la moda y por ende la fotografía de moda tiendan, por idiosincrasia (o lo que sea), a desafiar convencionalismos, es clave y sin duda, representa un importante grano de arena dentro de todo este cambio de paradigma y cuestionamiento de muchas viejas prácticas a ideologías conservadoras y absurdas. Diría que existe una verdadera intención por representar la masculinidad de muchas otras formas a las convencionales y de construir un contexto en el que todos quepamos, (no solo hablando de “masculinidad”), al menos de parte de mis referentes o de los artistas que más admiro y por supuesto que de mi parte, en mi labor como fotógrafo. Desde luego no quiere decir que estemos del otro lado de la barda de los prejuicios sociales, o que esto se haga siempre apropiadamente, pero sin duda es un precedente importante y el que sea algo que dé tanto de qué hablar es muestra de ello”. Mario refleja en sus palabras la amplia visibilidad de diferentes realidades que se plasman en la fotografía del retrato masculino, un panorama cada día más abierto, y como en cualquier otro asunto deberíamos ser capaces de debatir, pues el debate genera conceptos más ricos.

La fascinante y majestuosa visión de Vinyet con los modelos masculinos no ha dejado indiferente a nadie en el mundo de la moda, sus editoriales han conseguido un estilo muy marcado que toca tanto la delicadeza como la gallardía, y que especialmente exuda una belleza elegante como sello. Ella nos narraba así su visión: “A día de hoy yo creo que vale todo en la moda cara al público, pero luego es una realidad distinta para quienes estamos en el sector. Yo en mis fotos siempre al hacer casting me he basado en lo que siento y en lo que me gusta, considero que tengo mis prototipos de belleza muy marcados. Mi opinión personal es que hay fotógrafos que hacen fotos a modelos que están de moda, algo que es lícito para tener un crecimiento más rápido, no es mi caso. Debo decir que se me ha cuestionado cuando decidí centrarme en hombres, porque suelen ser hombres quienes hacen fotos a los modelos masculinos. Pero, aunque a veces haya dudado, he tenido claro que quería centrarme más en el hombre por motivos personales y porque me gusta muchísimo más y éstos mismos me han dicho que se han sentido cómodos para expresarse tal y como son en mis fotos. Y estoy muy agradecida a los modelos a los que les he hecho fotos. Y nada me falta decir que yo en mi foto busco la naturalidad, aunque a veces se pose no busco algo que no se entienda”. Vinyet definió también su visión de esta fotografía con naturalidad, sin olvidar los retos a los que ha tenido que enfrentarse por ser una creadora femenina retratando a modelos masculinos. Creo que su aportación es esencial para ir comprendiendo un poco más este rompecabezas.

La Elasticidad de Las Nuevas Masculinidades a través de la Fotografía

The Longest Ride para GQ Portugal por Vinyet

Antes de llegar al tercer y último lado del triángulo, es decir, los modelos. Te pido que mientras lees tengas en mente la imagen masculina de las revistas que te mencioné al principio: Slippage Magazine, Fucking Young… etc, pues esas personas son los verdaderos protagonistas y sujetos, son los que aparecen en las fotos, y los que ponen sus caras para representar todas las fantasías, conceptos, y mundos artísticos, tanto los suyos propios como los de los equipos creativos que hacen posible estas series. Los modelos de los que hablo cruzan campos que van más allá de la fotografía de moda, entrando en la arena de la fotografía artística, la conceptual, e incluso el arte performativo. Ellos son los auténticos titanes que se encargan de cumplir con las exigencias de unos artistas, pero también de una industria que busca vender, y canalizar mensajes. El arte como medio de comunicación, siendo los modelos esos altavoces que llevan las ideas a los que miran. La capacidad de adaptación camaleónica de los modelos está por encima de su condición física y belleza, deben rendir al máximo en diversos papeles, como si se tratase de actores de una función que cambia de guión narrativo en cada jornada.

Hoy juego a ser una criatura marina, mañana encarno la estética del sadomasoquismo, y pasado me convierto en un príncipe moderno con una falda enorme de tul.

Esa podría ser la ruta en la agenda de uno de ellos.

La voz de los modelos la pone Jordan Daniel @jordannielh que posee una carismática y genuina audacia frente a la cámara, ya sea en fotografía o en vídeo, y que a pesar de su evidente juventud cuenta con una gran experiencia en editoriales de moda, pues ha trabajado con los más grandes del medio, y como cabría de esperar para unas cuantas de las publicaciones que hemos nombrado como referentes para este artículo. Hoy es una de las nuevas caras de la reconocida agencia de modelos 2 Icons Management. Jordan me contaba así su perspectiva: “Pienso que la masculinidad de hoy es más un rol exigido por la sociedad que impulsado biológicamente. Hay otros valores y expectativas que afectan cómo retrato y represento la masculinidad en diferentes tipos de fotos, como modelo represento cómo los fotógrafos o clientes perciben, cuando quieren un personaje masculino, por ejemplo, en mi experiencia, algunos clientes quieren que yo aparezca. Sin esfuerzo pero extravagante, otros quieren que flexione los músculos”. Desde esta visión realista y profesional Jordan conecta la fotografía de moda masculina con sus objetivos.

La Elasticidad de Las Nuevas Masculinidades a través de la Fotografía

The Groom por Seigar

Antes de terminar este pequeño ensayo me gustaría apuntar al adjetivo “nuevas”, y cuestionarlo, pues aunque la imagen de Harry Styles, Lil Nas X o de Bad Bunny juegue con la ambigüedad, y pueda parecer rompedora, referirse a estas posturas y actitudes como “nuevas” puede despertar cierto recelo. Y es que a pesar de que las nuevas masculinidades lleven años siendo un motivo de análisis y de crítica, en especial por su vertiginoso éxito, lo cierto es que la indeterminación del género ha estado presente antes en la imagen masculina, sirvan como ejemplos ya incluso manidos un eterno David Bowie, un Boy George en los ochenta, tres grandes iconos de la música que también jugaron con estos roles: Michael Jackson, Prince y George Michael, mientras agrupaciones musicales de chicos mostraron una estética evasiva como fueron Menudo o Take That. Y si lo pensamos aún más cerca tuvimos a Tino Casal, el glam cañí. Mi conclusión es que llevan con nosotros hace mucho tiempo, pero he de reconocer que la capacidad de transformación de los roles masculinos está hoy más acelerada y presente en nuestra sociedad, y en la cultura pop como reflejo. Se cabalga a todo galope, a galope gallardo.

Para cerrar este artículo me gustaría rescatar, enfatizar y exclamar una simple palabra: empatía. Creo que, sin ella, todo puede sonar y hacerse más complicado.

Me voy a permitir la licencia de expresar mi sentir como fotógrafo. En mi trabajo, yo he relacionado las nuevas masculinidades con el amor propio, y lo he conectado con mi exploración del concepto de identidad: todo aquello que nos define. Lo ideal es ser leales y fieles a cómo nos sentimos. Y mejor aún sin las dichosas etiquetas que parece que en vez de abrir nuevos horizontes nos van dividiendo en pequeñas parcelas desde donde se nos hace más difícil comunicarnos, entendernos, comprendernos y aceptarnos. Es más, expresarnos a nuestra manera nos hace estar en armonía, sencillamente lo que viene a ser: sentirnos a gusto para que me entiendan, y es que como diría la Agrado:

“Porque una es más auténtica cuanto más se parece a lo que ha soñado de sí misma…”

Seigar.

@jseigar

1 respuesta

  1. Jsourire dice:

    Maravilloso artículo

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