REM KOOLHAAS
Este mes hablamos de uno de los arquitectos más influyentes e importantes del mundo contemporáneo. Se trata de Rem Koolhaas, uno de los llamados “Star-Architects” por su gran obra construida a nivel mundial, siempre provocativa y polémica al igual que sus varias publicaciones y libros que tambalean las teorías arquitectónicas modernas.
Rem Koolhaas nace en Rotterdam en 1944 y vivió durante su infancia en Indonesia. Funda su estudio OMA (Office of Metropolitan Architecture) en 1975 que es una pequeña oficina de 60 m2 en Ámsterdam aún existente. Su obra se destaca por ser una arquitectura espectáculo desligada de patrones estéticos y formales de la arquitectura moderna.
Su primer libro se llama “Delirious New York”. Fascinado por esta ciudad interpreta lo que él consideraría el “manhattanismo”. Desarrolla teorías no escritas sobre cómo entender el desarrollo de Manhattan. Defiende a fondo el desarrollo de una ciudad en vertical donde se apilan una serie de estratos en los que suceden diferentes funciones dentro de la ciudad. Dalí y Le Corbusier son sus principales referentes para desarrollar sus pensamientos en este libro. Del surrealismo le conquista lo irracional, donde se cuestiona todo lo producido por la arquitectura racionalista de varios años atrás del movimiento moderno. Racionalismo en el que enmarcamos a Le Corbusier, al que critica y se opone constantemente.
Otro de sus libros más destacados es “S, M, L, XL”, donde categoriza y ordena los diferentes elementos que conforman el desarrollo de la arquitectura según su tamaño; desde un detalle constructivo a una escala urbana. En “La ciudad genérica” describe con una serie de situaciones comunes que se dan en las ciudades globalizadas. Habla de las masas descomunales de población, del sinsentido de urbanismos basura, de la complejidad y anonimato de los barrios, de la banalidad de la arquitectura y de la falta de identidad, dejando de lado las raíces de la historia y de la cultura.
Ha estado muy presente también en el cine. “Rem”, es una película biográfica de su hijo Tomas sobre su padre, que se presentó el año pasado en el Festival de Cine de Venecia. Koolhaas también participó en la producción de las arquitecturas imposibles de la película “Minority Report”.
Un película muy polémica de los directores Louise Lemoine e Ila Bêka fue “Koolhaas Houselife” que muestra una de las casas más increíbles que hizo el arquitecto, (Maison à Bordeaux). Esta casa está especialmente diseñada para su dueño que tras un accidente se había quedado en silla de ruedas. La casa dispone de la tecnología más propia de una nave espacial que de una casa. Muros giratorios, habitaciones que suben y bajan, ventanales que se abren solos…
Con una estética y música a lo “2001: A Space Odyssey”, la película retrata el funcionamiento de la casa con una principal protagonista: la señora de la limpieza. La historia cuenta las hazañas, curiosidades y dificultades del cuidado de una casa de fantasía.
Hablemos de su arquitectura que, bajo mi humilde opinión, no entra en mucha consonancia con sus teorías arquitectónicas y urbanas de cuando era joven. Sus edificios son colosales, de masas definidas y formas deconstruidas pero bajo patrones de funcionalidad programática.
Las formas que Rem Koolhaas intentan describir la sociedad y el lugar en las que se insertan sus proyectos. Lleva hasta el límite la experimentación de la mezcla de los factores fundamentales de la arquitectura: forma, construcción y programa, dotándolas de sentidos innovadores e inesperados.